Para el cuidado de las joyas, deben seguirse unos sencillos consejos:
- Evite el contacto de la joya con productos de limpieza domésticos que pueden dañar su color, como por ejemplo la lavandina.
- Para la limpieza de las joyas debe usarse agua tibia y detergente. Puede utilizar un cepillo de dientes suave y después secarlas con una gamuza o un paño. Para mayor brillo secarlas con un secador de pelo en modo caliente.
- No deben exponerse las joyas a cambios bruscos de temperatura.
- Es preferible guardar las joyas de manera individual en sus estuches originales para su correcta conservación.
- Si se utiliza un joyero, procure que las piezas estén en compartimentos separados. Sobre todo que no entren en contacto con piezas de otros materiales para evitar su oxidacion.